VOX POPULI

Para las diversas mitologías el Ave Fénix es un enorme pájaro envuelto en llamas y de plumaje rojo anaranjado, como el fuego, Una tradición judía afirma que fue el único animal del Edén que resistió la tentación y conservó la vida eterna. En la mitología egipcia, el ave fénix representaba el Sol, que muere por la noche y renace por la mañana, mientras que para la tradición cristiana primitiva era un símbolo de inmortalidad y resurrección. Su nombre proviene del griego “phoinix” que significa rojo, considerándolo un animal fabuloso, una especie de semidiós que se consumía por acción de su propio fuego cada 500 años mientras un ave fénix nueva y joven surgía de sus cenizas. “Nuevamente el Estado corre a meter la mano en el bolsillo del que trabaja” expresé en la sesión de la Legislatura del 14 de marzo último, en referencia a las retenciones establecidas por el Ministro Lousteau apenas tres días antes. Mi advertencia sobre las consecuencias del conflicto que se estaba desatando, me valió reprimendas de parte de legisladores oficialistas, quienes procuraron descalificarme primero, para reducir a la mitad el tiempo disponible en el período de Manifestaciones Generales después. En la democracia confiscada no hay lugar para los molestos. Tampoco para los carteros portadores de malas noticias para los inquilinos del poder. Quien se aprovecha del poder público en beneficio propio no quiere perder el tiempo solucionando los problemas que aquejan al Pueblo. La mordaza alperovichista resulta útil para desconocerlos, aunque no sirva para solucionarlos. El 2 de junio presenté un proyecto para declarar la "inaplicabilidad de las retenciones móviles en Tucumán" y pedí su tratamiento sobre tablas en la sesión del 6 de junio. La respuesta del Gobernador no se hizo esperar. Con precisión germánica las tropas de choque alperovichistas ocuparon la Legislatura. Amenazantes, estos grupos de tareas incívicas respaldaron la intolerancia complementaria a la mordaza. "A más oposición menos democracia", fue la fórmula empleada por el Gobernador kirchnerista. Desde la negación de los problemas hasta las dos fugas del recinto protagonizadas por la tropa oficialista, destinadas al abatimiento del debate público, existe un galimatías de recursos usados por el Gobernador para escapar hacia adelante. Y se metió en el túnel porque divisó una luz al final del mismo. Con dos ciudadanos muertos a cuestas, avanzó ciegamente en su afán obsecuente, con frenética velocidad hacia la luz que en el fondo se agigantaba en tamaño e intensidad. Pero confundido y solamente cuando sintió el impacto, percibió que la luz en el túnel era de un tren que avanzaba en sentido contrario, con un maquinista particular: Julio Cobos, un ex correligionario devenido vicepresidente de la Nación. Hoy, 17 de julio, la democracia confiscada hizo uso de una fórmula infalible: "a mayor represión e injusticia del régimen, más democracia" Hoy, el Senado de la Nación defendió la esencia del sistema democrático que consiste en legislar traduciendo la voluntad del pueblo en una norma legal de cumplimiento comunitario obligatorio. La locomotora guiada por Cobos, con el criterio de que cualquiera fuere el resultado de la votación, una norma equivocada jamás logrará sostenerse si va en contra de los intereses colectivos, aplastó a la corporación que gobierna en provecho propio. Más allá que fuimos reivindicados en nuestro esfuerzo quienes nos oponemos desde hace veinticinco años a esta Corporación gobernante, esta vez la democracia fue tan contundente como el Ave Fénix renaciendo desde las cenizas que le auguraron los desvaríos ideológicos de los mandantes de turno. En su vuelo majestuoso es tan fecunda que brinda una nueva oportunidad a quienes se encargaron de humillarla y confiscarla. Tiende un puente de plata para los necios y equivocados que sintiéndose dueños del poder la menospreciaron. Acerca a los labios moribundos de los infames traidores a la Patria, el agua salvífica que les permitirá recuperar la dignidad perdida. Como el Ave Fénix, también su canto se transforma en esperanza para los amantes de la paz y la justicia.

RENZO CIRNIGLIARO